Ronan Shaughnessy, estudiante del Programa de Doctorado en Ciencias Biológicas UC con mención en Biología Celular y Molecular, tesista de doctorado del Laboratorio de Citología Biomédica del CARE Chile UC, ha publicado como primer autor un artículo científico en la revista FEBS Journal. Su trabajo se centra en el receptor del factor de crecimiento epidermal (EGFR por su nombre en inglés), un receptor tirosina-quinasa que se encuentra frecuentemente mutado o sobre-expresado en cánceres de origen epitelial y es, por lo tanto, un blanco predilecto de drogas anti-tumorales.
Hoy en día, los fármacos empleados en el tratamiento del cáncer incluyen drogas que contrarrestan la función exagerada del EGFR a través de la inhibición de su actividad tirosina quinasa o del bloqueo de la unión de su ligando estimulante. El problema de estos tratamiento es que luego de un tiempo se desarrolla resistencia. Es importante buscar nuevas estrategias. “A raíz de que el tráfico endocítico o internalización del EGFR es un regulador muy importante de su función, creemos que la perturbación farmacológica de este proceso podría ser una buena estrategia antitumoral contra cánceres que dependen del EGFR”, explica el candidato a doctor.
El cáncer es una de las principales causas de muerte en Chile y en el mundo. Investigar sus mecanismos y desarrollar nuevas terapias es clave para la salud. Los hallazgos de Shaughnessy abren la posibilidad de utilizar la enzima PAP (ácido fosfatídico fosfohídrolasa) como un nuevo blanco terapéutico contra el cáncer. “Al inhibirse esta enzima con fármacos que se han utilizado en clínica con otros motivos se induce una internalización del EGFR, haciéndose inaccesible a los estímulos que lo activan. Además el EGFR ya activo se acumula en compartimentos intracelulares, prolongando su señalización desde estos compartimentos”. Las drogas utilizadas por Shaughnessy, el D-propranolol, empleado experimentalmente en el tratamiento de arritmia, y Desipramina, un antidepresivo de uso clínico actual, inhiben la proliferación y la formación de colonias tumorales de células cuya malignidad depende del EGFR, señaló Ronan Shaughnessy.
“En mi tesis estudio las vías de señalización del ácido fosfatídico (PA) que regulan la endocitosis del EGFR y otros procesos, evaluando su potencial uso terapeútico contra el cáncer. Utilizo D-propranolol para elevar los niveles de PA. He observado efectos antitumorales en células cancerígenas que son dependientes del EGFR para su crecimiento. Sin embargo, también he observado efectos similares en células que expresan niveles muy bajos del EGFR, indicando que deben existir otros mecanismos anti-tumorales inducidos por la elevación de los niveles del PA. Mi investigación intenta dilucidar estos nuevos mecanismos de acción y vías de señalización del PA desencadenados por D-Propranolol. He visto efectos positivos de la droga en cánceres de cerebro y estómago in vitro, y de melanoma y útero tanto in vitro como en modelos de ratón in vivo”.